En este espacio se desarrollará una modalidad de la
violencia que es conocida por muchos, la violencia intrafamiliar, un tipo de
violencia que lamentablemente resulta ser muy común y para muchas personas adultas,
niños y adolescentes es una realidad que deben vivir cada día.
Lo primero que se debe hacer para poder entender y
desarrollar el tema es el explicar su concepto, la violencia intrafamiliar, también
conocida bajo el nombre de violencia doméstica es “cualquier situación de
maltrato físico, psicológico, sexual o patrimonial, en el que la persona que
realiza el acto violento tiene una relación de consanguinidad, afinidad o
adopción con la persona agredida.”
Como se indica anteriormente, la violencia
intrafamiliar o doméstica es un conjunto de distintos tipos de violencia, ya
que puede abarcar la violencia física, sexual, psicológica, económica,
violencia contra la mujer entre otros, además que puede ser ejercida por
cualquier persona en perjuicio de un familiar, sea un padre o madre, un esposo
o esposa, un abuelo o abuela, entre otros.
Para muchas personas la violencia doméstica resulta la
realidad en la que viven, muchas mujeres son víctimas de este tipo de
violencia, ya que sus parejas las agreden físicamente, causándoles daños
físicos y emocionales; y si hay niños presentes que tengan que ver esas situaciones,
le generará grandes problemas o traumas a nivel psicológico al vivir en un hogar
violento. Para estos casos existe el Instituto Nacional de las Mujeres que es
la entidad encargada de poder brindar apoyo a las mujeres que viven en esta
realidad, además si es un caso denunciado le tocaría al Organismo de
Investigación Judicial realizar todas las labores de investigación y posteriormente
el Poder Judicial es el encargado de llevar a cabo el proceso de penalización
al agresor, cabe aclarar que esto sucede únicamente si el caso es denunciado.
Pero también es importante resaltar que los hombres
también pueden ser víctimas de violencia doméstica por parte de su pareja, ya
que al igual que en el tema de la violencia sexual contra hombres y niños
varones, se tiene la noción de que los hombres no pueden ser víctimas, a menudo
cuando un hombre manifiesta o denuncia que es víctima de violencia por parte de
su pareja, principalmente cuando es una mujer, las personas tienden a burlarse
de él y algunas autoridades pueden no tomarlo en serio, algo que resulta
repudiable, porque ninguna persona que sea víctima de violencia merece ser
ignorado o burlado solo por su género, todas las personas que sufren violencia
merecen el mismo nivel de respeto y atención. En el caso de los hombres no existe
ninguna entidad que vele por su bienestar, si no pequeñas fundaciones, organizaciones
o grupos que se encargan de brindar apoyo a quien lo necesita, si el caso es
denunciado el OIJ y el Poder Judicial son las entidades que se encargan del
caso a nivel investigativo y penal.
Otras víctimas comunes de la violencia intrafamiliar o
doméstica son los niños y adolescentes, pero estos pueden ser víctimas en dos
manifestaciones distintas, primeramente al ser testigos de que su padre agrede física,
verbal o sexualmente a su madre, o viceversa siendo la madre la agresora y el
padre la víctima, ya que el tener que presenciar dichos actos genera un efecto
negativo en el desarrollo de estos niños y adolescentes y puede influir en que
sean adultos disfuncionales con problemas psicológicos o pueden convertirse en
agresores.
La segunda manera en que pueden ser víctimas de esta
violencia es en primera línea, recibiendo agresiones físicas, como golpes, agresiones verbales, como malos tratos o insultos, o abuso sexual, sean estas por parte de su
padre, madre, hermanos, abuelos, tíos, primos, entre otros.
En los casos de violencia intrafamiliar donde las
víctimas sean niños y adolescentes, existe un proceso especial que busca la protección
de esta población, mediante medidas de protección y actuación, como el brindar
apoyo, ayuda psicológica y generar una intervención en el hogar, en casos donde
la situación es muy grave se procede a sacar al menor del hogar para poder
rescatarlo de dicha situación, posteriormente el menor será enviado al hogar de
un familiar cercano y de confianza, pero si no existe algún familiar calificado
para el cuido del menor, este será enviado al albergue mas cercano del Patronato Nacional de la Infancia, esta es la entidad encargada de velar por el bienestar
de los niños y adolescentes de Costa Rica.
Lamentablemente esta institución ha sufrido un gran
deterioro en los últimos años, por lo tanto muchos menores no pueden ser ayudados,
ya que en algunos casos los menores reportan el caso y no se les presta
atención, por tanto deben seguir viviendo en un hogar de violencia, en algunos
casos los menores que son enviados a algún albergue terminan en un ambiente
similar o peor del que venían, ya que se han visto casos donde los menores que
viven en albergues del PANI han sufrido agresiones por parte de los trabajadores;
y en casos mas serios la institución ignora los casos, tal como fue en el caso
de la bebé Keibril y su madre, donde el Patronato Nacional de la Infancia en
una negligencia ignoró totalmente el caso y establecía que no había ningún riesgo
y terminó en el secuestro de una bebé que al día de hoy no ha aparecido.
Esta situación debe cambiar, el PANI debe de replantearse
su actuación ante los casos de violencia, porque a esta institución le corresponde
velar por niños y adolescentes y lamentablemente no lo está haciendo.
Bibliografía
Guananoticias. (s.f.). ¡AYUDA! Una palabra que puede salvar vidas en casos de violencia intrafamiliar. Obtenido de Guananoticias: https://guananoticias.com/wp-content/uploads/2023/05/802.jpg
Poder Judicial. (s.f.). Violencia doméstica.
Obtenido de Observatorio de Violencia de Género contra las Mujeres y Acceso a
la Justicia:
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